jueves, 28 de julio de 2011

Con una oreja enfrente de la otra

Llego a casa y la veo recogida ¡ohhhhhh, qué majo él! Hasta el lavavajillas puesto y todo ♥. Más feliz que una perdiz me dispongo a comer. 

Antes de independizarme mi querida madre me regaló la batería de cocina AMC. No sé si conocéis las ollas pero cuestan un riñón y parte del otro. 
Yo me habría conformado con unas del Carrefour y voy que me mato pero ya conocéis a los papis, que quieren lo mejor para sus hijas.

Las tapas de estas ollas llevan un reloj enroscado para controlar la temperatura. Es un poco delicado y hay que evitar que se caiga, mantenerlo mucho tiempo bajo agua y, por supuesto, nada de lavavajillas.

Al parejo se lo tengo más que advertido porque más de una vez ya lo he pillado metiendo la tapa entera dentro sin desenroscar el relojito. Después de 700 millones de veces recordándoselo creo que son suficientes para no caer en el despiste de meterla entera.

Suena la alarma del lavavajillas y allá que voy yo toda dispuesta a colocar las cosas cuando miro el carril de abajo y ¡¡¡¡HORROR!!!! 
Creo que no tengo que explicar que había dentro y ,como era de esperar, roto....

¿Algún hombre con 2 orejas normales, sin tapones, o que simplemente no asienta con la cabeza como si te escuchara? 

Y aún me dirá cuando venga "Ah, pues no sabía..." o "Encima que te lo pongo..." como si te estuviera haciendo un favor. Ains, qué paciencia.

12 comentarios:

  1. El mio no es capaz ni de darle al botón del lavabajillas, nunca!
    El que no hace nada nunca se equivoca, tambien los hay los que lo hacen mal para que tu no vuelvas a pedirle que lo haga.

    ResponderEliminar
  2. Este si le da al botón pero cree que cuando termina el programa se colocan los platos solos en su sitio xD

    ResponderEliminar
  3. bueno chicaaaa!!! cosas que pasan. yo tengo al mío amenazado de muerte si se acerca a menos de medio metro de la lavadora o de la secadora.
    el lavaplatos todavía, y eso que ya he renunciado a repetirle qué cosas no deben ir JAMAS porque se joden del tó.
    es lo que hay. Al menos es bueno matando bichos sin manchar la pared, paseando al perro y sacando la basura, que es para lo que sirven los tíos en el ámbito doméstico... :-D

    ResponderEliminar
  4. Jajaja amenazado de muerte!! Yo a tener que tomar ejemplo de vuestras sabias experiencias.

    Yo intento domesticar al mío pero, joder!! se me desvía. Nunca me dice que no a nada, nunca pone pegas, pero lo va dejando: "ahora, ahora lo hago". Total, que al final me harto y lo hago yo, que es lo que creo que pretende. Malditos! xD

    ResponderEliminar
  5. con lo bien que voy a vivir yo solita!!!! :D

    pd: yo acabo de ir a recoger la ropa que estaba tendida... me encuentro que ya esta doblada...me sorprendo.
    Todo y eso, la cojo para llevarmela...cuando me viene una cierta humedad y un olor raruno...!
    Mi hermano ha recogido mi ropa todavía mojada y la ha doblado, de manera que podia tender la suya... os lo podéis creer?!!?

    efectivamente, la he vuelto a lavar...y le he obligado a tenderla y recogerla..CUANDO YA ESTE SECA!!!
    q se habrán pensado!!! inútiles!!

    ResponderEliminar
  6. HOMBRES!! Yo al mío le prohíbo poner lavadoras que contengan mi ropa, él no entiende lo de temperatura baja, o sin centrifugar, o tiempos más cortos para ropa delicada. Ya no te digo separar por colores. Como si hablaras en chino!!!

    Por no hablar del baño, ese gran desconocido, le da miedo limpiar la taza del wc, ni que le fuera a morder, qué morro tiene el jodío...

    Por cierto, hoy he averiguado, después de 5 años lavando mis mallas adidas, que no debo usar suavizante, porque entonces pierden el efecto evacuador de sudor... Maña qué torpe... Así con toda la ropa del estilo...

    ResponderEliminar
  7. @Aretha jajajajaajajajajaja

    @Vane, ahhhhhhhh!A mi me pasa igual. Cree que el baño tiene pirólisis.
    Además, tiene la mala costumbre de dejar SIEMPRE el bote de la gomina fuera y a veces se lo escondo jajaja a ver si aprende.

    ResponderEliminar
  8. ¡Esta si que es buena! Me llama al móvil y me le digo que para qué mete la tapa dentro y me dice: Si yo no he sido, ya estaba dentro.

    Me quedo más tranquila. Ahora tendré que averiguar si ha sido el loro o la gata quien ha introducido la tapa con el reloj dentro del lavavajillas

    ResponderEliminar
  9. Jajajaja, me parto!!!

    Yo no me puedo quejar mucho, que en comparación me he llevado una joya!!! Aunque hay cosas que me desesperan... como el daltonismo agudo que le entra si por la mañana no le he preparado la ropa al niño y me lo viste de una manera que me sangran los ojos cuando lo recojo a la tarde...
    O como hace poco, en un día feo, feo, le digo (varias veces) que AUNQUE NO LLUEVA cuando salga, que le lleve el chubasquero al niño porque se van de excursión (muy cerquita de casa). Me llama al dejarlo, le pregunto por el chubasquero y me dice que no llovía y no se lo ha puesto.... ¡¡¡pero no te he dicho que se lo pongas!!! ¿¿¿ y si llueve cuando salgan??? - Bueno, en el autocar no se mojarán.... - Qué autocar, si van al lado!!!??? Aaaarrrggg!!!!

    Vendrá el sentido común sólo en el cromosoma X??? Y aunque no venga de serie, qué hay de la capacidad de obedecer una orden sencilla???

    De verdad que a veces hay que tener una paciencia...

    ResponderEliminar
  10. Jajajajaja a mi cuñado le pasa igual. A su hija, mi ahijada, la viste de una manera que yo creo que lo hace a propósito porque a conciencia no puede pegar menos la falda, con la camiseta y los zapatos xD

    ResponderEliminar
  11. El mio a veces no saca ni la basura. Para colmo de mis males, enfrente tengo a un Policia que os juro esta todo el dia barriendo su puerta y limpiando los cristales, la mujer debe estar loquita con él. Yo lo estaría

    ResponderEliminar
  12. Qué de aventuras!!!, el mío tiene sus cosillas pero no me quejo... al menos no mucho, pero podía hacer más... como todos.

    Lo peor que ha hecho es ponerle los zapatitos a los niños al revés (derecho en izquierdo y viceversa), menos mal que eso fue hace muchos años, cuando iban aún en sillita y a los pobres míos no creo que les dolieran mucho los pies... un poquito disléxico...

    ResponderEliminar