Ni Almatrichi ni Flamenco

Nunca se puede decir "de este agua no beberé, ni este cura no es mi padre". Mira que había dicho yo veces que no me volveré a casar, pero esta mañana he visto la luz en forma de vestido. Me lo he comprado. Eso sí, lo he cogido en varias tallas porque no sé cuándo lo utilizaré. Para una boda por la iglesia, no es. Para una boda por lo civil, tampoco. Pero para una boda por lo penal, no me digáis que no es apropiado. Quizás yo me cubriría la cara con el velo, no sé, tengo tiempo para pensarlo. Tampoco me veo con mi padre ejerciendo de padrino, se lo pediré al Chikiliquatre a ver si me hace el honor. Total que no compraré ni en Flamenco ni en Almatrichi, porque esta mañana mi tarjeta ha echado humo. Pero estoy contenta, sé que es una buena inversión porque un modelo así jamás pasa de moda. Prometo invitaros a todas a la boda. A ver cuando ponen una venta de novios y tema solucionado. Solteras y divorciadas del blog, no dejéis pasar esta ocasión, ocupa poco espacio, cabe en cualquier sitio y te saca de un apuro si te piden matrimonio.